En un comunicado de 4 páginas y de audio enviado a los medios de comunicación, los maoístas han reclamado la responsabilidad del ataque del 25 de mayo a un convoy del Partido del Congreso que dejó 24 muertos. La nota, enviada por un portavoz maoísta de Dandakaranya señala que un destacamento del Ejército Guerrillero de Liberación Popular o EGPL llevó a cabo el ataque al convoy y añade que los altos dirigentes Mahendra Karma, Nand Kumar Patel y V C Shukla eran sus principales objetivos. Mientras que el Sr Karma y el Sr Patel murieron en el ataque, el Sr Shukla resultó gravemente herido. Está siendo tratado en el hospital de Gurgaon. En la nota, los maoístas han culpado a Nand Kumar Patel por aprobar la Operación Cacería Roja y permitir a fuerzas centrales en las operaciones antinaxalitas mientras era Ministro del Interior del Estado. También señalan que querían “castigar” a Mahendra Karma y hacen un listado de sus supuestos “delitos”.
Mientras que los maoístas lamentan la muerte de algunos funcionarios inocentes del Partido del Congreso, han culpado al Jefe de Gobierno de Chhattisgarh Raman Singh, al Parido del Congreso y al BJP (Partido Bharatiya Janata) por sus políticas “antipopulares”. Los maoístas también condenaron al Primer Ministro Manmohan Singh, a la presidenta del Partido del Congreso Sonia Gandhi, al jefe del BJP Rajnath Singh y al Jefe de Gobierno Raman Singh por calificar el incidente como un ataque a la democracia y declararon que no hablaron “cuando personas inocentes fueron asesinadas por el estado”.
En la nota, los maoístas también han planteado siete demandas claves. Solicitan la retirada de las fuerzas paramilitares de Dandakaranya y que cese la Operación Cacería Verde. También han exigido que los revolucionarios y miembros de tribus “inocentes” sean excarcelados de forma incondicional.
Hacia las 3.30 de la tarde del sábado, unos 250 maoístas atacaron un convoy de 25 vehículos en que viajaban dirigentes y miembros del Partido del Congreso, que regresaban de un acto del partido en Sukma.
Hicieron estallar minas y luego dispararon balas contra el convoy. Las dos docenas de miembros de personal de seguridad que viaja en el convoy repelió la agresión con sus armas pero pronto se quedaron sin municiones. Los maoístas entonces rodearon el convoy, arrebataron los teléfonos móviles de los dirigentes y luego les dispararon. El ataque está siendo investigado por la Agencia de Investigación Nacional (AIN).
La traducción al español es responsabilidad de Gran Marcha Hacia el Comunismo. Madrid, mayo 2013.
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