Traducción realizada por el camarada SADE.
LA GUERRA CONTRA EL PUEBLO Y EL PAPEL DE LAS FUERZAS DEMOCRÁTICAS
¡POR UN FRENTE DEMOCRÁTICO CONTRA LA OPERACIÓN “GREEN HUNT”, EL PUNJAB ACOGE UNA GRAN ASAMBLEA EN JALANDHAR!
¡CONSTRUIR UN AMPLIO ABANICO DE MOVIMIENTOS DE RESISTENCIA!
¡OPONERSE A LAS POLÍTICAS NEOLIBERALES Y A LA REPRESIÓN DE LOS MOVIMIENTOS POPULARES POR LAS FUERZAS ARMADAS!
El 17 de octubre, mientras el pueblo celebraba la fiesta de Dussehra que señala la victoria del Bien sobre el Mal, el Frente Democrático contra la operación “Green Hunt” del Punjab organizó una gran asamblea en la sala Desh Bhagat Yadgar de Jalandhar que tuvo por lema “La guerra contra el pueblo y el papel de las fuerzas democráticas.” Tomaron la palabra la escritora y pensadora Arundhati Roy, conocida por sus posiciones en defensa de los intereses populares y ganadora del premio Booker Award, y el activista social gandhiano Himanshu Kumar. Centenares de personas de toda condición –profesores de universidad, investigadores, estudiantes, artistas, hombres de letras, activistas culturales, periodistas, granjeros, trabajadores del campo y de la industria, sindicalistas, pensadores, etc.-, procedentes de todos los rincones del Punjab y de Chandigarh, asitieron a la asamblea. La sala de reuniones, con capacidad para 900 personas, se quedó más que pequeña y centenares de personas tuvieron que escuchar los discursos desde el exterior de los locales.
LA GUERRA CONTRA EL PUEBLO Y EL PAPEL DE LAS FUERZAS DEMOCRÁTICAS
¡POR UN FRENTE DEMOCRÁTICO CONTRA LA OPERACIÓN “GREEN HUNT”, EL PUNJAB ACOGE UNA GRAN ASAMBLEA EN JALANDHAR!
¡CONSTRUIR UN AMPLIO ABANICO DE MOVIMIENTOS DE RESISTENCIA!
¡OPONERSE A LAS POLÍTICAS NEOLIBERALES Y A LA REPRESIÓN DE LOS MOVIMIENTOS POPULARES POR LAS FUERZAS ARMADAS!
El 17 de octubre, mientras el pueblo celebraba la fiesta de Dussehra que señala la victoria del Bien sobre el Mal, el Frente Democrático contra la operación “Green Hunt” del Punjab organizó una gran asamblea en la sala Desh Bhagat Yadgar de Jalandhar que tuvo por lema “La guerra contra el pueblo y el papel de las fuerzas democráticas.” Tomaron la palabra la escritora y pensadora Arundhati Roy, conocida por sus posiciones en defensa de los intereses populares y ganadora del premio Booker Award, y el activista social gandhiano Himanshu Kumar. Centenares de personas de toda condición –profesores de universidad, investigadores, estudiantes, artistas, hombres de letras, activistas culturales, periodistas, granjeros, trabajadores del campo y de la industria, sindicalistas, pensadores, etc.-, procedentes de todos los rincones del Punjab y de Chandigarh, asitieron a la asamblea. La sala de reuniones, con capacidad para 900 personas, se quedó más que pequeña y centenares de personas tuvieron que escuchar los discursos desde el exterior de los locales.
La sala donde se celebró la asamblea se recubrió de cartelones con mensajes acordes a la ocasión. El cartelón central contenía el poema del pastor Martin Niemoller –“PRIMERO VINIERON A LLEVARSE A LOS COMUNISTAS”, con un mural al fondo que reflejaba la lucha de los pueblos. Otros dos cartelones contenían poemas de dos conocidos poetas populares del Punjab: Sant Ram Udasi -MAGHDA RAHIN VE SURJA (Brilla radiante, ¡Oh sol!)- y Pash -ASIN LARANGE SATHI (¡Camarada! Lucharemos)-. Había citas de Shaheed Bhagat Singh, “HAWA MEIN RAHENGI MERE KHIALON KI BIJLIAN” (Vivo o muerto, mis ideas vivificarán el aire eternamente).
La asamblea estuvo presidida por una mesa integrada por el Dr. Parminder Singh (catedrático de la universidad Guru Nanak Dev, Amritsar), el catedrático A. K. Maleri (Ludhiana), Sh. Yash Pal (profesor jubilado y editor de VARG CHETNA), el catedrático Ajmer Singh Aulakh (eminente autor teatral punjabí y defensor de los intereses populares), y los camaradas Gandharav Sen Kochhar y Sh. Naunihal Singh (ambos del Comité Desh Bhagat Yadgar, constituido en homenaje a los mártires del Movimiento Gadar [para más información sobre este movimiento puede consultarse http://www.sikhiwiki.org/index.php/Gadar_Movement]).
Arundhati Roy inició su alocución señalando que el estado indio ha llevado la guerra a su propio pueblo en muchas partes del país –Noreste, Cachemira, el Punjab y otros muchos lugares- durante los últimos 60 años, empleando al ejército y a la policía para aniquilarlo sin compasión. Arundhati saludó afectuosamente al pueblo menesteroso y a los pueblos tribales que viven en los bosques de Chhattisgarh, Jharkhand, Orissa, Andhra, Bengala Occidental y Maharashtra, que luchan valerosamente para salvar sus tierras, bosques, agua y riquezas minerales de la rapiña de las empresas más ricas del mundo. Predicar la no violencia a los pueblos tribales de Chhattisgarh -dijo- es inmoral. A esos que acusan a los pueblos tribales de ser violentos, les preguntó: "Cuando se obliga al pueblo a morir de hambre, cuando se le extirpa de sus raíces tras privarle de sus tierras y de su sustento en nombre del desarrollo, ¿no es eso acaso violencia? ¿No es irónico aconsejar a los que tienen el estómago vacío y vacíos también los bolsillos que empleen los métodos de Gandhi de la huelga de hambre y el boicot a los productos extranjeros?"
Dijo A. Roy que para oponerse a la operación “Green Hunt” no es necesario ir a luchar a las junglas de Dantewada. La lucha contra la injusticia allí donde estemos es también una contribución importante a esta causa. Las luchas contra las ZEE [SEZ en sus siglas en inglés ("Zonas Ecónomicas Especiales")] y contra el sistema explotador de la Comision Agente (ARHTIYA, en sus siglas en inglés) son parte del combate contra la operación “Green Hunt”. Hizo un llamamiento a los intelectuales y a las masas trabajadoras para que construyan un amplio abanico de movimientos de resistencia contra las políticas neoliberales del estado y su agresión violenta contra los movimientos populares bajo la forma de operaciones militares como la “Green Hunt”.
En relación con los acontecimientos actuales en los estados sometidos a la operación “Green Hunt”, sostuvo Roy que existe un estrecho vínculo entre desarrollo y genocidio. Se está produciendo un genocidio so capa del desarrollo. Cuando se arranca a las gentes de sus tierras, se les priva de su cultura y de sus medios de vida, se les condena a la muerte. En la India, decenas de millones de personas sufren el SIDA del hambre. El hambre no sólo conduce a su víctima a la muerte: también proyecta su sombra de agonía sobre las siguientes generaciones.
Afirmó Arundhati Roy que mientras los naxalitas llevan a cabo una guerra prolongada contra el sistema capitalista y las grandes empresas, el estado indio hace la guerra contra su propio pueblo. La escritora sugirió dotarse de medios variados de resistencia en el seno de una lucha más amplia que desafíe las políticas represivas del estado.
Dijo igualmente que la operación “Green Hunt” había comenzado en el Punjab antes que en Chhattisgarh, con la llegada de la “Revolución Verde" ("Green Revolution", en ingles). La operación “Green Hunt” es, en realidad, el mecanismo para despojar al pueblo de su tierra y de los recursos ligados a ella tales como el agua, los bosques, las minas, etc. La “Revolución Verde” y su corolario en forma de suicidios de granjeros son un indicador de ello. Alrededor de 180.000 granjeros acosados por el peso de las deudas se han suicidado en el país. Deploró que el Gobierno del Punjab haya catalogado a las 17 organizaciones de granjeros y de trabajadores del campo como organizaciones frentistas naxalitas. Los que levantan su voz contra la injusticia son catalogados como naxalitas. Si los gobernantes continúan poniendo en práctica sus políticas de privatizaciones y liberalización económica, tendrán que desplegar al ejército por todo el país. En dos decenios de políticas neoliberales, el número de personas que vive por debajo del nivel de la pobreza se ha multiplicado, mientras cien personas poseen el 25% de la riqueza nacional.
Arundhati señaló que la democracia india se ha convertido en algo insustancial. Democracia no significa meras elecciones periódicas. Los derechos democráticos del pueblo son sistemáticamente pisoteados. La constitución india ha perdido su significado puesto que el poder judicial, la prensa y el parlamento están, todos, cortados a la medida de los intereses de las grandes empresas y de la gente adinerada. La prensa está en manos de las grandes empresas. Los tribunal están fuera del alcance de la gente corriente y se han convertido en una herramienta para avalar las políticas neoliberales y antipopulares del estado.
Se produjo una animada discusión tras su discurso y contestó a la mayor parte de las preguntas que le hicieron los asistentes.
El conocido activista gandhiano, Himanshu Kumar, que había llevado a cabo una marcha ciclista de protesta por Rajasthan, Gujrat y Maharashtra, tras participar en 16 asambleas contra la operación “Green Hunt” a lo largo y ancho del Punjab a invitación del Frente Democrático, hizo partícipes a los asistentes de su análisis de la situación que se vive en esos estados. Dijo que la situación era explosiva en todas partes. Se preparan muchos Dantewadas [en referencia al operativo llevado a cabo por los maoístas el 6 de abril de 2010 en que fueron aniquilados 76 policías] debido a las políticas antipopulares de los gobernantes. Dijo Kumar que en Gujrat, la Ley de Derechos Forestales prevé la cesión, en régimen de arrendamiento, de hasta 10 acres [unos 40 mil metros cuadrados] de tierra a los pueblos tribales de las zones forestales. Pero el gobierno de Modi no les ha cedido ni una sola pulgada de tierra. Sin embargo, el mismo gobierno ha regalado 102.000 acres de tierra a 176 grandes empresas. Se ha clausurado una universidad en activo para emplear el suelo en que se asentaba en una planta de Tata Nano [modelo barato de coche creado por la compañía de automoción india Tata Motors]. Cien personas de este país controlan el 25% de su riqueza. Nuestro primer ministro dice que el pueblo se está volviendo violento. Pero la cuestión es por qué hay violencia después de seis decenios de independencia. ¿Son los naxalitas los únicos responsables de esta violencia? En realidad, el modelo de desarrollo que han puesto en marcha los gobernantes hace que los pobres sean cada vez más pobres y los ricos cada vez más ricos. El término “desarrollo” se ha convertido en un sinónimo de “privación”: privar a los pobres de sus medios de subsistencia, como, por ejemplo, la tierra, el agua, los bosques, las riquezas minerales, etc., para llenar el bolsillo de los ricos. ¡Cómo no va a haber violencia! En lugar de seguir los principios de la justicia social y de la equidad, seguimos la ley de la selva en que la fuerza es el derecho. Hay que cambiar esta situación. Citando a Gandhi y a Vinoba Bhave, Himanshu Kumar dijo que si la injusticia y la iniquidad persisten en la sociedad, la violencia es inevitable, porque es sencillamente inimaginable que las víctimas de la injusticia y de la iniquidad las soporten sin chistar; sin duda se levantarán para cambiar el sistema, para hacer valer sus derechos. Afirmó Kumar que no se debe tolerar la injusticia. Se le debe hacer frente a toda costa. La “no violencia” jamás se debe convertir en una excusa que nos exima de luchar contra la injusticia.
Ambos oradores estuvieron rodeados por los retratos de Shaheed Bhagat Singh, un cartelón con el poema del Pastor Niemoller y tres libros: La Historia del Partido Gadar, La Historia de Naujwan Bharat Sabha y Diálogo con los revolucionarios. También se homenajeó a la Sra. Veena, mujer de Himanshu Kumar, que pasó 18 años con él en Dantewada trabajando con los pueblos tribales.
Después de la asamblea, Arundhati Roy mantuvo un encuentro en la sala del Museo Gadar con investigadores y estudiantes de tres univesidades del Punjab y con destacados historiadores. Junto con Himanshu Kumar, la familia de éste y Sanjay Kak, visitaron el museo mostrando un vivo interés por la historia revolucionaria del Punjab y, en particular, por el movimiento Gadar.
Al final de la asamblea, los participantes aprobaron a mano alzada varias resoluciones exigiendo el fin de la operación “Green Hunt”; la retirada de las fuerzas militares y paramilitares de las zonas de los pueblos tribales; el desmantelamiento de los Salwa Judum [fuerzas paramilitares empleadas por el gobierno indio en la lucha contra la Revolución] y otras organizaciones fascistas semejantes; el reconocimiento de los derechos de los pueblos tribales sobre sus bosques, tierras, agua y recursos naturales; la paralización de las ZES y las políticas de desarraigo de los pueblos tribales en nombre del desarrollo; dar marcha atrás a las políticas neoliberales de privatización, globalización y liberalización; abrogar disposiciones legislativas como la Ley de Poderes Especiales de las Fuerzas Armadas, la Ley de Prevención de Actividades Ilegales, etc.; poner fin a las ejecuciones extrajudiciales amparadas en falsos enfrentamientos armados y a la imputación de personas inocentes en causas penales falsas; revocar la prohibición impuesta al PCI maoísta y a sus organizaciones frentistas; permitir a los periodistas que defienden los intereses del pueblo y a las organizaciones democráticas visitar las zonas tribales; llevar a cabo una investigación judicial sobre la muerte del dirigente maoísta “Azad” en un falso enfrentamiento armado; detener los montajes que tienen por objeto imputar en causas falsas a Arundhati Roy, Himanshu Kumar, Nisha Biswas y otros destacados intelectuales; castigar a los asesinos de los dirigentes campesinos Sadhu Singh Takhtupura y Pirthipal Singh Alisher y a los asesinos de campesinos en Khanna Chamiara, en el Punjab; detener la imputación de dirigentes y activistas de las organizaciones de masas de granjeros, campesinos, trabajadores y jóvenes desempleados del Punjab y de otros estados en causas penales falsas y acabar con los casos de torturas; cerrar todos los centros de interrogatorio, como el de Amritsar, conocido como Centro Conjunto de Interrogatorios.